Es el segundo caso de violencia hacia la mujer ocurrido en Añatuya en pocas horas, y esto contó la víctima a la Policía
En la ciudad de Añatuya, y en horas de la madrugada de este viernes, un cabo de Policía arrastró y golpeó brutalmente a su concubina delante de su hijita.
A las 2.40 se presentó en sede policial la víctima, de 28 años y domiciliada en barrio Juan XXIII para denunciar a su concubino, un cabo de Policía con idéntico domicilio.
Según contó, mantiene una relación con el acusado desde hace 12 años, fruto de la cual nació una hija que actualmente tiene un año, y desde hace cierto tiempo esa relación se volvió conflictiva.
En relación al hecho que motivó su comparendo en sede policial, narró que a la 1.30 de hoy estaba en la vivienda con su padre —que está bajo su cuidado por su avanzada edad y porque tiene una fractura de cadera—, la bebé y el denunciado.
A la mencionada hora entró a bañarse y le pidió al efectivo que hiciera dormir a la nena, pero cuando salió del baño notó que no lo había hecho porque estaba con su celular en las manos.
Se produjo una discusión y el denunciado comenzó a agredirla. La tomó del cabello y la arrastró por la vivienda, tras lo cual le pegó varias trompadas en la cabeza mientras le decía «estoy cansado, no voy a volver más».
Durante la golpiza, la mujer chocó un ventilador de pie y éste, a su vez, cayó encima de la criatura, que presenciaba la feroz secuencia.
Tras el ataque, el cabo de Policía se subió a su auto y se marchó llevando un bolso con prendas de vestir. Además, había intentado llevarse a la menor, lo que su madre —la víctima— impidió.
La fiscal de turno, doctora Garzón ordenó que personal de Policía Científica trabaje en el domicilio donde ocurrió la agresión, se realice informe socioambiental con relevamiento vecinal, se entreviste a testigos, se practique examen médico a la joven y se le remitan las actuaciones.
