El padre hizo viajes y se compró ropa y perfumes mientras su hijo necesitaba un tratamiento para salvar su vida.
Murió en Belo Horizonte, Brasil, el bebé Joao Miguel, de 1 año y 10 meses, que luchaba contra una enfermedad conocida como AME (Atrofia Muscular Espinal).
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El caso del niño se conoció después de que el padre organizara una colecta para recaudar para pagar el tratamiento del niño y se apropiara del dinero para lujos personales. Debido a la enfermedad degenerativa, que causa la pérdida de neuronas motoras, Joao Miguel necesitaba tomar un medicamento cuya caja costaba 70 mil dólares.
l triste caso movilizó a la localidad de Conselheiro Lafaiete, a 100
kilómetros de Belo Horizonte, e incluso la Policía Civil del lugar había
lanzado campañas para ayudar a juntar el dinero.
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El pequeño Joao necesitaba un tratamiento urgente.
Sin embargo, el padre del niño, Matheus Henrique Leroy Alves, de 37 años, retiró parte del dinero recaudado yhuyó a Bahía para gastar el dinero en viajes, mujeres y ropa. Fue detenido tras ser encontrado por la Policía Civil en un aparthotel de Salvador hace tres meses.
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Alves fue acusado de delitos de malversación, malversación y apropiación indebida de objetos de valor de una persona con discapacidad, abandono material y denuncia falsa de delitos.
El padre del menor fue detenido hace tres meses.
El caso estalló cuando una investigación judicial sobre el padre determinó que gran parte del dinero que se encontraba en una cuenta para el tratamiento del pequeño había «desaparecido».
Al confesar el delito, el hombre dijo que había gastado la plata en fiestas, en mujeres, viajes y ropa de marca. Intentó argumentar que lo hizo porque ‘estaba siendo extorsionado’, pero esa excusa no pudo comprobarse en sede judicial.
