Momentos Épicos De Rápidos Y Furiosos – No sólo las escenas más geniales, sino los momentos que te hicieron levantar la quijada del piso y que dejaron a la audiencia gritando de incredulidad.
Son divertidas a su manera, pero las primeras tres películas de la franquicia Fast claramente siguen una fórmula bastante predecible, hasta que la tercera entra en su parte final. Para decirlo amablemente, Tokyo Drift es la entrada más polarizante de la serie, abandonando a Dom y Brian a favor del chico del campo Sean Boswell y el corredor retirado Han Lue. Al final de la película, mientras atraviesan las calles de la ciudad, corriendo por sus vidas, el auto de Han es golpeado repentinamente mientras atraviesa una intersección. Sean sale corriendo de su propio auto para ayudar a Han, quien está atrapado y sangrando en el auto destrozado, pero el gas se enciende.
La muerte de Han conmocionó a los fanáticos y provocó verdaderos jadeos en los cines. Su arco resonó entre el público que lo vio superar un pasado trágico para encontrar un nuevo propósito a través de Sean.
Los fanáticos amaban la actitud y la alegría particular de Han que contrastaba maravillosamente con la rudeza de los otros corredores, haciendo que su muerte afectará mucho más.
Este momento es monumental en la franquicia. Consolidó Tokyo Drift como una visión esencial y puso en marcha el camino que dominaría la próxima década de la saga. Y cuando Han regresó para la cuarta, quinta y sexta película, tuvimos que pausar las cosas solo para descubrir la línea de tiempo.
Cuando un afligido Han le dice al equipo que se mudará a Tokio en Rápidos y Furiosos 6, se puede sentir a todo el cine sentado y prestando atención. Todos se preguntaban si eso era todo. ¿Todo había terminado? Luego, un epílogo sorpresa sorprendió a todos, mostrando la muerte de Han desde un nuevo ángulo. Resultó que esto no fue un choque accidental. Impactados, vimos a Deckard Shaw salir del otro auto y arrojar fríamente el collar de plata de la cruz de Letty en los restos con Han aún atrapado. Al alejarse, Deckard deja un mensaje de voz amenazante para Dominic Toretto mientras el auto explota detrás de él.
Con un impacto que todavía se siente en la novena película, la muerte de Han, en ambas ocasiones, es sin duda el momento más pausado de toda la saga.
