En el documento, el socio gerente de la firma informa que se cierra el sanatorio por «la asfixia financiera generada por los embargos bancarios» y explica la falta de pacientes y los bajos aranceles que pagan las obras sociales provocaron la crisis.
La crisis en el sanatorio Sagrada Familia entró en fase terminal. En el móvil de Aire de Santa Fe, los trabajadores contaron que esta mañana comenzaron a recibir los telegramas de despido. En el documento, el socio gerente del sanatorio, Esteban De Giovanni, informa que a raíz de la situación de quebranto por la sostenida pérdida de pacientes y los bajos aranceles percibidos de las obras sociales la empresa ha decidido cerrar definitivamente el Sanatorio Sagrada Familia.
En el telegrama, los directivos del sanatorio también señalan que los incumplimientos en los pagos y la «asfixia financiera generada por los embargos bancarios preventivos injustamente dispuestos» llevaron a tomar la decisión de cerrar la empresa.
El conflicto se visibilizó el viernes pasado, cuando el personal de seguridad intentó que los trabajadores de la guardia no ingresen al sanatorio y se generaron momentos de mucha incertidumbre y tensión, que incluyó la toma del hall por parte de los empleados.
Audiencias
El viernes a la tarde, en una audiencia en el Ministerio de Trabajo, se decidió que el efector continúe funcionando —a pesar de que no quedaban pacientes— hasta este este lunes a las 11 de la mañana, cuando se debía realizar una segunda reunión entre el propietario y los representantes de los trabajadores. Pero los directivos de la empresa no asistieron.
Juan Manuel Pusineri, secretario de Trabajo de la provincia de Santa Fe, dijo que debido al procedimiento irregular que hizo la empleadora para llevar adelante los despidos tienen que garantizar la comparecencia del titular del establecimiento. Para eso van a agotar los medios a su alcance para que mañana mismo asistan a la audiencia.
Inclusive adelantó que van a usar la fuerza pública si es necesario, ya que hay un incumplimiento evidente. De acuerdo a la actitud del empleador y a lo que se dialogue el martes en la audiencia verán cómo avanzan con otro tipo de medidas.
Pusineri también afirmó que saben que los telegramas empezaron a llegar, de hecho los leyeron en la audiencia, pero que desconocen si le llegó a la totalidad del personal.
Acerca de lo manifestado en el telegrama, el secretario afirmó que la empresa habló de una situación de quebranto y falta de pacientes, pero sostuvo que «más allá de eso, no hay una justificación objetiva que trascienda los telegramas y que esos motivos tampoco justifican que se proceda de esa manera».
Además, dijo que el diálogo por parte de la entidad sindical siempre estuvo disponible, pero que necesitan que asistan las dos partes. También habló de que si hay alguna posibilidad de que alguien compre la empresa esperan poder conversar.
