Del Potro y la estafa económica de su padre. No descartó un eventual regreso al circuito, a la vez que aseguró que era hora de terminar con el sufrimiento provocado por las numerosas operaciones.
«Sentí que era el momento de decir que jugaba. Era el momento de dar un cierre a este sufrimiento y a esta pesadilla que vengo viviendo desde el día que me operé», explicó el tandilense en una entrevista con Mariano Zabaleta emitida por Star+.
En un momento de la entrevista, Delpo se refirió a un tema que estuvo en el tapete: la relación con su padre (fallecido en enero de 2021 tras una operación por una afección cardíaca) y sobre todos los rumores que lo envuelven por una supuesta estafa económica contra su hijo: «Más allá de lo que puedan decir, lo más importante es que en mi familia sabemos quién es quién y quién hizo cada cosa. La educación mía y de mi hermana es gracias a mi papá y mi mamá (se emociona). Y lo otro va por otro carril, que se va a solucionar», sentenció con la voz entrecortada. Y agregó: «Ahora hay gente en la que yo estoy confiando y que me va ayudar. Así como tengo mi equipo de entrenador, kinesiólogo, médico, también está eso, y es cuestión de que pase el tiempo y confiar. Poder transcurrir el camino que yo quiero, con mi familia, de la manera que me merezco».
«Mi relación con mi papá fue muy especial: él no entendía nada de tenis, no interactuábamos por ahí. Él era veterinario, mi momento con él era subirme a la camioneta e ir todo el día al campo, a atajar las gallinas o ver cómo estaban las vacas, y lo disfrutaba muchísimo, me encantaba», recordó Del Potro en otro momento de la íntima entrevista.
«Estas cosas no las cuento porque no me gusta contar intimidades, pero cuando mi papá estaba enfermo en medio de la pandemia yo pasaba noches en la puerta de la clínica. Para verlo tardaba 40 minutos en cambiarme. Cuando se habla de los médicos, y que no se los aplaude más, yo viví lo que era eso. Yo viví ponerme tres pares de guantes, antiparras, casco, ambos, cosas en los pies para ver a mi papá a dos metros y a veces a través de un vidrio», detalló.
También se refirió a lo fuerte que fue para él que su mamá, quien nunca había ido a verlo a un partido de tenis profesional, haya estado en su despedida, en el Buenos Aires Lawn Tennis Club: «No fue fácil, mi mamá también fue en figura de mi papá. Creo que desde arriba me vieron esa noche mi papá, mi hermana y yo sé que ellos están bien y tranquilos. Y mi mamá, mi hermana y yo estamos acá, tratando de buscar este camino y transitarlo como nos merecemos».
«Me gustaría ser padre, tener varios hijos. Me gustaría vivir en Tandil. Yo me tengo que curar la pierna porque, ¿cómo no voy a andar en bicicleta con mi hijo? A jugar al tenis si algún día me dice ‘che, mostrame cómo hacías’. O al fútbol. Ese padre activo, así me gustaría ser», expresó.
Del Potro y la posibilidad de una vuelta al tenis
El campeón del US Open 2009 dejó la puerta abierta para un posible retorno al tenis en el futuro: «No cierro esa ventana a que pueda ocurrir un milagro como ha pasado con Murray. El tenis es mi pasión».
Por otra parte, Del Potro, ex Nº3 del ranking ATP, recordó lo que tuvo que luchar para levantar la ensaladera en 2016: «Cuando volvimos de ganar la Copa Davis dije: ‘Acá está la copa, ahora voy a dormir tranquilo’. Pero para llegar a eso tuve que atravesar un camino de sufrimiento y cosas feas».
Por último, Juan Martín del Potro resaltó lo difícil que es la vida del tenista: «Desde muy chico y hasta el último día, vive bajo presión. Las presiones van cambiando pero desde el día que sos consciente que te vas a dedicar hasta el último día, vivís bajo presión».
Del Potro y la estafa económica de su padre «y que sufrió el tandilense»
La historia parece una pesadilla hecha realidad para el tenista. Su papá falleció hace un año, el 11 de enero de 2021, cuando tenía solo 63 años. Daniel se convirtió en una especie de manager, tomó el mando del área comercial y contractual, y se estima que le hizo perder a Juan Martín más de 30.000.000 de dólares.
Realizó pésimos negocios sin darle aviso a su hijo de lo que sucedía. Alquiló 9.000 hectáreas, además equipamiento con la idea de sembrar soja. Pero no tenía conocimiento y se terminó endeudando. Cuando Juan Martín comienza a hacerse cargo de las cuentas, descubre lo ocurrido y que no tiene la fortuna que había acumulado como tenista.
De hecho, en el partido que perdió con Federico Delbonis en el Argentina Open, no pudo cobrar su premio por orden del juez en lo Comercial, Alberto Alemán. Le embargaron el dinero ya que un acreedor de la empresa que creó su papá, Agroganadera Reconquista SA, solicitó el embargo con el objetivo de cubrir un monto cercano al millón de pesos.