“Es un luchador”, dijo la mujer que lo encontró a un lado de la carretera y hoy cuida de él.
La crueldad del ser humano es inconcebible a veces. Su falta de criterio y empatía al momento de lidiar con otros seres vivos traspasa cualquier capacidad de sentido común, a tal punto que sus actos parecen los de un cruel dictador más que los de una persona. Lamentablemente este es otro caso más en donde un perrito tuvo la mala suerte de toparse con una persona que no tenía ningún cariño por él.
Audra Petraškienė conducía por una calle cerca de un río en Lituania hace unos meses cuando vio algo a un lado de la carretera que le llamó la atención. Un perro solo y empapado estaba sentado esperando que alguien lo ayudara pues alrededor de su cuello tenía un ancla de 8 kilos haciendo peso.
Juzgando por su apariencia, el perro probablemente había estado en al río pero logró salir quién sabe cómo.
“Al parecer alguien puso un metal muy pesado en su cuello y lo lanzó
al río. El perro estaba temblando de frío, pero es un luchador”, dijo
la hija de Petraškienė, Andra, a The Dodo.
No se sabe con claridad cómo el perro sobrevivió al intento de ahogo, pero menos mal lo hizo. Petraškienė lo tomó y llevó a su casa, donde la quitó el metal alrededor de su cuello y luego al veterinario para que examinaran su estado de salud.
Le informó a la policía sobre lo ocurrido para investigar el caso y asegurarse que la persona que le hizo esto a este indefenso animal pague por ello y nunca más vuelva a tener a uno bajo su cuidado.
Por ahora el perro se encuentra bajo el cuidado de Petraškienė, quien se asegurará de “hacer lo que sea mejor para él”, dijo su hija.