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Una mujer con retraso madurativo buscó pareja por Badoo y la violaron

SCALDIA
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El muchacho se hizo pasar por buen candidato. Sus 25 años lo ayudaban. Su terreno de conquista eran las redes sociales. Así, Matías se armó su perfil en Badoo a la espera de una víctima. Y la encontró en una señora de unos 40 años, que publicaba en la misma aplicación de citas.

La mujer, con un importante retraso madurativo, vive con su madre. Intercambiaron mensajes, sus números de celulares y comenzaron una relación virtual que se convirtió en real cuando el candidato se ofreció a una presentación formal en un almuerzo familiar.

El joven Matías llegó con su supuesta madre y hermano al departamento de la señora en Recoleta. Pero allí, reveló sus verdaderas intenciones, violó a la señora discapacitada, golpeó a su madre y junto sus falsos padres les robaron dinero y sus pertenencias.

La tecnología que permitió al delincuente concretar sus crímenes, posibilitó a la policía identificarlo y detener a su supuesto hermano y madre, que en verdad eran su hermano y la mujer de su hermano. La investigación estuvo a cargo de la División Investigación de Delitos Tecnológicos de la Policía Federal con la intervención de la fiscal Mónica Cuñarro.

El episodio ocurrió el 9 de abril pasado cuando el supuesto Matías y sus falsos parientes acudieron a la comida formal de presentación al departamento de la señora discapacitada en Austria y Juncal, de Recoleta, donde la mujer vive con su madre de unos 62 años.

Los extraños se tomaron el tiempo de almorzar y al concluir Matías invitó a la mujer con la que había chateado por Badoo a levantar los cubiertos. Como la madre notó que su hija discapacitada no regresaba se levantó a buscarla y encontró a Matías violando a su hija.

Al regresar al living y encarar al resto de los extraños, los falsos parientes del novio empezaron a golpear a la señora, la ataron y revolvieron todo el departamento. Se llevaron dinero, objetos de valor y los teléfonos y hasta el carnet de discapacitada de la señora.

La policía de la Ciudad comenzó la investigación con poca suerte, rastreando a Matías en las redes sociales y buscando su imagen las cámaras de seguridad de la Ciudad. Hasta que en mayo, la fiscal Cuñarro dio intervención a Delitos Tecnológicos de la Policía Federal que, con las imágenes del trío de ladrones y abusadores saliendo del departamento de Juncal y Austria, ensayaron diferentes recorridos imaginarios que pudieron haber realizado los sospechosos hasta que dieron con ellos en las cámaras del Hospital Rivadavia y en las de la estación Palermo del ferrocarril, en Puente Pacífico.

Esa información, más la descripción de las víctimas, los datos de la redes sociales la triangulación de los teléfonos celulares, permitió a los policías seguir la pista de los tres sospechosos.

Las imágenes de otras cámaras, por el paso del tiempo, habían sido borradas, pero los policías lograron mediante comparaciones de registros de la web dar con el verdadero rostro de uno de los sospechosos y con este indicio mediante la utilización de fuentes abiertas y plataformas de consulta de la policía lo identificaron como D.Q.

Este dato fue de gran impulso, porque con su identidad descubrieron que se trataba de una persona con antecedentes por robo y que era conocido en las redes sociales como Diego DSM. A partir de allí se establecieron las identidades de sus acompañantes.

Se compararon estas imágenes con las de las cámaras de la Ciudad antes y después del hecho se logró ubicar a los sospechosos en Austria y Berutti mientras se dirigían al domicilio de sus potenciales víctimas. La policía los identificó como DQ, LQ (su hermano) y CC (la mujer de su hermano).

Con sus identidades empezaron a rastrear sus domicilios hasta que lograron dar con ellos y los vigilaron con discreción hasta que se produjeron tres allanamientos en sus viviendas de Florencio Varela en San Miguel y Moreno. Fueron el domingo a la noche cuando los policías de Lucha contra el Cibercrimen y grupos especiales irrumpieron en las viviendas.

Logaron detener a dos de los partícipes del robo y violación a quienes antes identificaron como LQ y CC en la casa de Florencio Varela, a quienes se les secuestró varios teléfonos e incluso el carnet de Discapacitada de la víctima, lo que permitió a la policía confirmar que participaron del hecho.

El tercer integrante del grupo, Matías, o DQ de 25 años tiene pedido de captura y está siendo buscado por brigadas policiales, dijeron fuentes policiales a LA NACION.

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