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Por qué los empresarios critican el proyecto de teletrabajo y qué cambios quieren incluir en el debate en el Senado

SCaldia
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La reacción obligada e inmediata del mundo empresario tras decretarse la cuarentena por el coronavirus fue activar el modo teletrabajo en los casos en los que se podía. Si bien algunas compañías lo vienen promoviendo desde hace años entre sus empleados, el confinamiento aceleró los tiempos.

Esa forma laboral utilizada en pymes y grandes multinacionales acaparó todas las miradas: las de los propios empleados, las de los políticos, las de los sindicalistas y las de los empresarios que, tras aprobarse en Diputados de forma rápida y con amplio apoyo, ahora buscan incluir cambios en el proyecto que se debatirá en el Senado la semana que viene.

Aunque los empresarios argumentan que en términos generales están “de acuerdo” con la necesidad de regular el teletrabajo, piden que la normativa sea “ágil y flexible y no complejizar la ya existente”, al punto de considerar que si esas características no se cumplen se correría el riesgo de que las empresas desalienten su implementación.

“Está regulación se está pensando en un contexto de crisis y de anormalidad. Hay que tener cuidado con regular en esta situación porque esta ley está pensada para después. Esto debiera tener un debate mayor”, reclama ante A24.com Brenda Puig, Líder de la Red de Abogados de IDEA (Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina) y Directora de Asuntos Legales y Relaciones Institucionales de Walmart.

Y agrega Puig: “Las entidades empresarias casi no tuvimos participación en el proyecto que se votó en Diputados y ahora está en el Senado. Buscamos un diálogo constructivo».

Brenda Puig, Líder de la Red de Abogados de IDEA (Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina) y Directora de Asuntos Legales y Relaciones Institucionales de Walmart (Foto: Idea)

La ejecutiva sostiene con énfasis que este proyecto “desalienta el teletrabajo” y que algunos de sus puntos terminan perjudicando al trabajador dado que al «sobreprotegerlo se logra un efecto contrario», en el que las compañías podrían optar por no aplicar la modalidad de trabajo remoto para evitar inconvenientes, potenciales entredichos y hasta juicios.

Tanto la Unión Industrial Argentina (UIA), como IDEA, el Foro de Convergencia Empresarial y la Cámara de la Industria Argentina del Software (CESSI) interpusieron críticas al proyecto que fue aprobado en Diputados y, dicen, los tomó por sorpresa.

Uno de los puntos críticos que tiene consenso entre estas asociaciones y agrupaciones empresarias va por el lado de que el teletrabajo es una modalidad, no una nueva actividad.

Por eso, reclaman, debe estar regulada dentro de la Ley de Contrato de Trabajo. Y que deje espacio a los convenios colectivos por actividad y a los convenios individuales para negociar acuerdos específicos según necesidades puntuales por sectores o situaciones.

Por estos días se activó una dinámica acción de lobby para contactarse con la CGT, con distintos senadores y autoridades de la cartera laboral. El objetivo es que se escuche la palabra empresaria y se puedan incluir cambios en el Senado, para luego volver a Diputados. Según supo A24.com, hay senadores oficialistas dispuestos a escuchar los puntos en conflicto. Aunque la proyección o estimación de los votos es aún incierta.

“Si queremos impulsar la Argentina de la sociedad del Conocimiento, con este proyecto de ley de teletrabajo no va a funcionar. Cuando se quiere sobreproteger, se genera el proyecto inverso”, argumenta a A24.com Claudio Cesario, presidente de la Asociación de Bancos de la República Argentina (ABA).

Claudio Cesario, presidente de la Asociación de Bancos de la República Argentina (ABA). (Foto: IDEA)

En el sector empresario consideran que esta normativa se aprobó con muchos diputados de corte sindical y que en esa línea se les delegan a los gremios potestades de injerencia tales, por ejemplo, que para que se proteja los bienes e informaciones (el software) de propiedad del empleador se requiera la participación sindical. En las compañías lo ven con desconfianza y es uno de los puntos que más destacan como negativos.

“El Senado tiene la obligación de escuchar estás consideraciones y de que haya un debate más amplio sobre este tema”, solicita Cesario. Y agrega otra previsión: «La industria del juicio con este proyecto se va a dar y sería un nuevo costo argentino. Y es una pena, porque el teletrabajo es valorado por todos los trabajadores, sin distinción de edades ni de géneros».

Cuáles son las principales críticas de los empresarios al proyecto aprobado en Diputados

Sobre la Jornada laboral (Art. 4) y el derecho a la desconexión digital (Art. 5):

El proyecto de ley dice que el empleador no puede contactar al trabajador fuera de horario y que el sistema debería impedir que se lo contacte. Pero las empresas consideran que eso es difícil de regular. En los hechos los mails involucran a muchas personas, lo cual hace impracticable a esta pretensión y de imposible control y con potenciales reclamos.

Sobre las Tareas de cuidados (Art. 6):

Las empresas observan que las tareas de cuidado privilegian a los teletrabajadores en comparación a los profesionales presenciales. En la normativa, se habilita al trabajador para realizar tareas de cuidados de menores, adultos o personas a su cargo o con discapacidades. Podrá tener tiempo para esas tareas y hasta suspender su trabajo. Esto es motivo de críticas o de revisión.

Sobre la Reversibilidad (Art. 8):

La reversibilidad de la modalidad teletrabajo a presencial no puede ser facultad exclusiva del trabajador, ni puede operar a su sola voluntad, sostienen en las empresas. Consideran que eso viola la facultad del empleador de organización y dirección de su empresa. Solicitan que haya un acuerdo de partes.

Sobre compensación de gastos (Art. 10):

En las compañías están de acuerdo en que deba proveerse al empleado de las herramientas de trabajo y se lo compense en caso de que tenga gastos adicionales. Pero objetan que una ley general entre al detalle de las herramientas que deban proveerse. Debe ser una regulación genérica. Piden que la compensación de gastos deberá ser razonable, con un tope o límite, y quedar claro que no es remunerativo.

Sobre Higiene y seguridad (Art. 14) y Sistemas de control y derecho a la intimidad (Art. 15):

Un punto que genera mucho rechazo en los hombres y mujeres de negocios. Dicen que no hay ninguna razón que justifique la delegación de facultades propias del Estado y/o del empleador en el sindicato. Menos aún que resulte necesario regular en esta ley general. Será importante que la reglamentación no establece requisitos excesivos en cuanto a las condiciones que deberá proveer el empleador en el domicilio particular del trabajador, reclaman.

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