Nahir Galarza, la joven condenada a prisión perpetua por el crimen a balazos de su novio Fernando Pastorizzo, cometido en 2017 en Gualeguaychú, no tiene paz. Su abogada, Raquel Hermida hace hincapié en el hostigamiento del cual es víctima su cliente desde el momento en que fue detenida. Ahora, un cambio de look habría sido el desencadenante para que una vez más la entrerriana sufriera consecuencias en sus condiciones de encierro.
“El jueves pasado Nahir pidió permiso para que su mamá (en horario de visita) le corte el pelo y le haga color”, contó a TN Hermida Leyenda. Pero al parecer, cuando más tarde los guardias la vieron distinta, todo se desmadró. “Allanaron su celda, levantaron el techo y le pusieron una custodia de tres oficiales armados para cruzar a estudiar su licenciatura en Psicología”, añadió.
La abogada especialista en casos de violencia de género que lleva adelante la defensa de Nahir Galarza aseguró que la joven conserva desde hace ya varios meses “un perfil bajo”, que de ninguna manera pretende alterar. “Trabaja desde las 8 y asiste no solo a la Facultad sino también a varios cursos”, describió sobre su rutina dentro de la cárcel.
En ese sentido, Hermida Leyenda señaló que el tratamiento diferenciado que recibe Nahir por parte de los penitenciarios no es otra cosa que una “persecución”, cuando ella solo “está esperando la resolución de la Corte Suprema y la posibilidad de acceder a un nuevo juicio”. “Nahir no quiere fugarse, solo sueña con un nuevo juicio que condene a su padre”, sostuvo por último la letrada, que reclama que cese el hostigamiento hacia ella.
La última declaración de Nahir ante la Justicia
Luego de que Nahir Galarza culpara a su padre por el asesinato de Fernando Pastorizzo, las miradas se posaron en la persona que logró que la joven oriunda de Gualeguaychú, condenada a cadena perpetua por el crimen cometido en 2017, le contara los abusos que sufrió a lo largo de su vida y que señalara a su padre como autor de los disparos que mataron al joven.
Ante estas declaraciones y con el pedido de los abogados de Galarza de anular el juicio y que se realice con perspectiva de género, la Corte Suprema de Justicia de la Nación se encuentra revisando el fallo. Vale recordar que la joven fue clara en su declaración: “Mi papá mató a Fernando”.
Ante esta situación, la hipótesis de un “pacto familiar” que se barajó durante las primeras semanas del caso, pero luego se disiparon con la declaración de Nahir, vuelven a tomar fuerzas. En el 2019, la joven había asegurado que “haría cualquier cosa por mi papá”, y en sus dichos sostuvo que estaría dispuesta a afrontar una cadena perpetua.
Luego de que Nahir Galarza, señalara a Marcelo Galarza como el autor de los disparos contra Pastorizzo; contó que fue víctima de abusos sexuales por parte de su tío paterno. “Nahir fue víctima de esos abusos durante muchos años”, detalló en su momento Raquel Hermida Leyenda, abogada de la joven. Todo esto salió a la luz, luego de cuatro años de prisión, por la intervención de una psicóloga de Paraná.
¿Quién es la psicóloga a la que Nahir Galarza le confesó que su padre había matado a Pastorizzo?
La joven de Gualeguaychú lleva ya cuatro años presa, pero su causa no queda cerrada por varias situaciones que fueron saliendo a la luz en este tiempo. Entre ellas las confesiones que hizo a una psicóloga en la que habla de abusos y señala a Marcelo Galarza como el asesino de Fernando Pastorizzo.
La persona que logró hablar y ganarse la confianza de Nahir Galarza es una experimentada psicóloga de la Unidad Penal N° 6: Nahir Montenegro. Luego de mucho trabajo en las sesiones, la joven no solo le contó los padecimientos que sufría, sino también habló sobre la violencia de género que Marcelo Galarza ejercía en contra de su madre Yamina Kroh, detalla Jorge Zonzini en un comunicado.
Montenegro nació en Río Gallegos y se recibió de psicóloga en la Universidad Catolica Argentina de Paraná; y llega a incorporarse al Servicio Penitenciario Nacional de Entre Ríos en el año 2011. Actualmente, es una de las cuatro psicólogas presentes en el penal donde Galarza cumple su pena.