Jim Bridenstine, jefe de la agencia estadounindense, advirtió sobre las probabilidades de una catástrofe.
Cada vez se escuchan más advertencias de agencias espaciales sobre el aumento de las probabilidades de que asteroides impacten en la Tierra. Esta vez, el jefe de la NASA, Jim Bridenstine, instó a las potencias del mundo a unir esfuerzos para crear un sistema de defensa ante la posible colisión de enormes rocas del espacio.
«Tenemos que asegurarnos de que la gente entienda que esto no se trata de Hollywood, no se trata de películas. Se trata, en última instancia, de proteger el único planeta que conocemos, ahora mismo, para albergar la vida y ese es el planeta Tierra», dijo Bridenstine en la Conferencia de Defensa Planetaria 2019 en Washington.
En este sentido, el funcionario destacó que en los últimos 100 años ha habido tres eventos devastadores e indicó que esta regularidad es inusual. El último fue en febrero de 2013 cuando un meteorito (un cuerpo rocoso más pequeño que un asteroide) se estrelló en una zona del sur de Rusia.
Lo que ocasionó el impacto de ese objeto fue un caos: la explosión masiva se extendió por cientos de kilómetros a la redonda y más de mil personas resultaron heridas por la onda de choque. La fuerza destructora fue tal que los expertos estimaron que tuvo la potencia de unas 20 bombas atómicas de Hiroshima.
«Me gustaría decirles que estos eventos son excepcionalmente únicos, pero no lo son», sostuvo Bridenstine.
Las declaraciones del funcionario se dan en paralelo a un ensayo de cinco días en el que participa la NASA junto con otras organizaciones internacionales ante un posible accidente apocalíptico por el impacto de un asteroide.