El fin de semana un joven perdió la vida en un incendio en su vivienda familiar. Se arrestó a su hermano y al esposo de su madre. Esta mañana se dictó la prisión preventiva para este último.
El domingo por la madrugada ocurrió un incendio en una vivienda en Santa Fe que le costó la vida a un joven de nombre Leandro. Cuando los bomberos llegaron a sofocar el incendio en Larrea al 4700 del barrio Los Ángeles, se encontraron con dos hombres en un evidente estado de nerviosismo.
El personal policial entendió que estaban intentando entorpecer la tarea de los bomberos por lo que fueron arrestados y llevados a la comisaría.
Dentro de la vivienda se encontró el cuerpo sin vida del joven, totalmente carbonizado. Las pericias de los bomberos determinaron que el fuego había sido iniciado de manera intencional, catalogado como peligroso y con riesgo de propagación.
El inicio del fuego fue violento y acelerado por el contacto de un elemento de combustión con elementos combustibles.Además, el origen del foco ígneo se localizaba en la puerta del dormitorio donde se encontraba la víctima, quien yacía en la otra esquina.
Para descartar que haya sido ese joven quien inició el fuego, se precisó que generalmente quienes utilizan el fuego para atentar contra su vida lo hacen sobre su propio cuerpo.
Una noche de peleas y excesos
El fiscal de homicidios Andrés Marchi imputó por el hecho el pasado lunes a las dos personas arrestadas esa noche, si bien esta mañana desistió de la detención del más joven de ellos, hermano de la víctima.
Al momento de enumerar las evidencias para sostener el pedido de detención contra J.J.B., padrastro de la víctima, tras explicar los alcances del informe pericial de los bomberos, pasó a relatar el contexto previo al incendio de la vivienda.
Tal como lo manifestaron los dos imputados en la audiencia, esa noche J.J.B. y su pareja estaban bebiendo bebidas alcohólicas y consumiendo drogas, junto con los dos hijos mayores. En un momento comenzó entre la pareja una pelea, ya que J.J.B. le reprochaba a la mujer situaciones vinculadas a sus parejas anteriores.
En ese momento, el hombre comenzó a auto agredirse con un arma blanca, ocasionándose heridas cortantes en distintas partes del cuerpo. En ese momento la mujer se retiró de la vivienda llevándose los cuatro hijos más pequeños, ante el temor de todos de que J.J.B. pudiera “cometer una locura”.
Antes de comenzar la audiencia esta mañana, se manifestó ante el juez Gustavo Urdiales la mamá de la víctima y pareja del imputado. La mujer, con pocas palabras, relató los malos tratos a los que era sometida ella y sus hijos por el imputado desde hacía mucho tiempo. “Tuvo que pasar esta desgracia para que se termine todo” manifestó.
Luego declaró el joven imputado, hermano de la víctima. Según su relato, la víctima se prendió fuego intencionalmente y él fue a salvarlo. Reconoció la pelea previa entre los padres, el consumo de estupefacientes y que su mamá se había ido de la casa con los cuatro hermanitos menores. A continuación dijo que se quedó dormido en la cocina y se despertó ya con el fuego en el dormitorio. “Lo fui a buscar a mi papá que estaba afuera, esperando que vuelva mi mamá, y le dije que había fuego” explicó el joven.
A continuación declaró J.J.B., quien se declaró inocente. El hombre manifestó que la víctima le había pedido un cigarrillo y se fue a dormir, deslizando la posibilidad de que haya sido un accidente. Pero también dijo que varias veces el joven había manifestado su intención de atentar contra su propia vida. El imputado recriminó la actitud de la mujer que tras la pelea se retiró de la vivienda y él se quedó con los hijos. “Me acusan de algo que no hice, fue una equivocación de mi hijo” se excusó.
Libertad para uno, prisión para el otro
Para el fiscal Marchi, el responsable de haber prendido fuego el dormitorio donde se encontraba durmiendo la víctima fue el padre. El hermano, imputado también, estaba dormido. No vio cómo inició el fuego. En cambio, J.J.B. siempre estuvo despierto.
Cuando el fiscal estaba repasando los testimonios colectados que dan cuenta que es imposible que el joven hubiera atentado contra la vida de su hermano, el imputado más joven rompió en llanto en la audiencia, que se vio interrumpida durante algunos instantes hasta que se recompuso.
Ante este contexto de violencia y agresión protagonizado por J.J.B. el fiscal anticipó que no se descarta la posibilidad de ampliar la imputación contra el detenido.
El defensor Raul Sartori destacó que no hay un elemento de prueba o evidencia que vinculen a J.J.B. con el inicio del fuego, y propuso alternativas a la prisión preventiva. El defensor hizo hincapié en las manifestaciones del joven fallecido, quien a viva voz el día anterior en la calle había expresado “dejen de pelearse entre familia, ya me van a ver en un cajón y me van a llorar”.
El juez Urdiales avaló la petición fiscal e impuso la prisión preventiva para J.J.B., y le otorgó la libertad al otro joven, sobre quien si bien aún se mantiene la imputación, por lo que expresó el fiscal en la audiencia se puede entender que quedará desvinculado de la muerte de su hermano.