Unicef ha revelado una alarmante situación en Argentina: más de un millón de niños se acuestan sin cenar debido a la creciente pobreza, un flagelo que afecta a más de siete millones de chicos en el país. Esta cifra fue expuesta en la octava encuesta de hogares con niños y adolescentes realizada por la organización dependiente de la ONU, bajo la campaña “El hambre no tiene final feliz”.
En Argentina, cada noche, un millón de chicas y chicos se van a dormir sin comer. El Hambre No Tiene Final Feliz, pero con tu ayuda puede cambiar esta historia.
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— UNICEF ARGENTINA (@UNICEFargentina) August 13, 2024
El informe indica que 1,5 millones de menores de 18 años se ven obligados a saltarse una comida diaria, lo que refleja el impacto de la recesión económica en la capacidad de los hogares para alimentar a sus hijos. En total, 4,5 millones de personas en Argentina no pueden cumplir con su alimentación diaria, con adultos que priorizan alimentar a sus hijos antes que a ellos mismos.
Además, la encuesta de Unicef destaca que 10 millones de niños han reducido su consumo de carne y lácteos en comparación con el año pasado, debido a la falta de recursos económicos. Casi la mitad de los hogares con niños no pueden cubrir los gastos básicos de alimentación, salud y educación.
La pobreza en Argentina alcanzó el 41,7% en el segundo semestre de 2023, afectando a 19,5 millones de personas, mientras que el nivel de indigencia ascendió al 11,9%, según datos del INDEC. La situación es aún más grave según el Observatorio de la Deuda Social Argentina (ODSA-UCA), que reportó un aumento de la pobreza al 55,5% y de la indigencia al 17,5% en el primer trimestre de 2024.
Ante este panorama, Unicef insta a una combinación de políticas que protejan los recursos destinados a la niñez y mejoren los esquemas de protección social para las familias más vulnerables. La preocupación por la pobreza ha superado a la inflación como el principal problema en la agenda social, reflejando la gravedad de la situación que enfrenta el país.