La acción, liderada por el personal del Servicio Penitenciario, responde a la estrategia de vaciar comisarías para fortalecer el patrullaje preventivo en las calles.
Lucía Masneri, secretaria de Asuntos Penales del Ministerio de Justicia y Seguridad, explicó que el objetivo es cumplir con la directiva del gobernador Pullaro y el ministro Cococcioni de liberar las comisarías de detenidos, trasladándolos a las instalaciones del Servicio Penitenciario. Este enfoque busca aumentar la presencia policial en las calles y mejorar el control de los centros penitenciarios.
«Estamos trabajando a marcha forzada para poner en práctica la orden del gobernador Pullaro y el ministro Cococcioni de sacar los presos de las comisarías y llevarlos al Servicio Penitenciario, lo que se traduce en poner más policías en la calle y controlar los penales», detalló Masneri.
La funcionaria enfatizó que la prioridad del Gobierno provincial, según lo anunciado por el gobernador, es reforzar el patrullaje preventivo. También destacó la importancia de que todos los internos estén bajo la custodia del Servicio Penitenciario, subrayando que las comisarías no deben utilizarse como lugares permanentes de detención.
El procedimiento se llevó a cabo en la Comisaría 21ª, ubicada en Av. Arijón al 2300, y los detenidos fueron trasladados a la cárcel de Piñero. En esta última, se están llevando a cabo requisas sorpresivas y aleatorias.
Masneri también abordó el estado de las unidades penitenciarias, señalando que durante los últimos cuatro años no se realizaron obras, excepto la inauguración y puesta en funcionamiento de la Subunidad 3. Sin embargo, mencionó que esta unidad no pudo reemplazar a la Unidad 3 debido a la falta de obra pública en ese periodo.