En la localidad de Arrufó, se realizó una saturación barrial que culminó con el secuestro preventivo de cuatro motocicletas.
Dos de estos vehículos eran conducidos por menores de edad, por lo que, tras el procedimiento, fueron restituidos a sus propietarios, notificando previamente a la Subsecretaría de la Niñez y al Juzgado de Menores de Rafaela.
Las otras dos motocicletas secuestradas no contaban con documentación que acreditara la propiedad. En una de ellas, se verificó que la chapa patente colocada no pertenecía al vehículo. Ante esta irregularidad, se dio intervención a la Fiscalía en turno, que dispuso la notificación del conductor por la causa abierta.
