La Policía provincial con asiento en el sur de Tucumán, terminó la jornada de ayer procurando la detención de un sujeto que el lunes por la noche, atacó a escopetazos a un grupo que jugaba al fútbol en la ciudad de Graneros.
Siete de los agredidos recibieron perdigonadas que les provocaron lesiones leves, por los que los llevaron, primero, a un Centro de Atención Primaria de la Salud de la zona, para derivarlos después al hospital de Concepción.
Algunos testigos del ataque, aseguraron que el agresor, menor de edad, disparó sin aviso, tres veces, usando una escopeta recortada que habría obtenido en la casa de su abuela, para luego escapar.
Sobre las causas que motivaron el ataque, la versión más fuerte habla de burlas que habría recibido el autor de los disparos, tras las cuales se retiró furioso de la cancha, para volver armado, y posiblemente bajo los efectos de alguna sustancia prohibida, indicó el medio Contexto.