Los concejales Edgardo Martino y Pablo Bonacina, integrantes del bloque Unidos para Cambiar Santa Fe, expusieron públicamente su preocupación por la situación económica de la Municipalidad de San Cristóbal, apuntando contra el relato oficial que encabeza la gestión.
El principal blanco de críticas fue el slogan institucional “Tus impuestos en obras”, que calificaron como vacío, engañoso y sin correlato con los números reales. Según los ediles, el municipio cerró el 2024 con un déficit de 235 millones de pesos, una cifra que, lejos de avalar el discurso de eficiencia, expone una crisis de gestión.
Un desfasaje económico insostenible
El balance del año pasado, según revelaron, deja al descubierto un manejo financiero preocupante. La deuda acumulada, explicaron, compromete la operatividad del Estado local y afecta la posibilidad real de llevar adelante obras o servicios esenciales.
“No se puede hablar de obras cuando el municipio está quebrado”, sentenciaron.
Además, remarcaron que el presupuesto proyectado para 2025 está artificialmente inflado, lo que enciende aún más las alarmas: “Se está dibujando un escenario que no existe. Es un número ficticio para maquillar una administración deficitaria”.
Falta de transparencia y desinterés por el contribuyente
Otro de los puntos señalados por Martino y Bonacina es la opacidad en los procesos de contratación y la nula respuesta institucional a los vecinos que pagan sus impuestos. Según el bloque, hay una gestión cerrada, sin canales claros de rendición de cuentas, y lo que es peor, una administración que parece no tener interés en escuchar al ciudadano común.
“Los contribuyentes cumplen. El municipio, no”, afirmaron con dureza.
Un llamado a la responsabilidad y al control
Desde el espacio radical reclaman mayor control del gasto público, responsabilidad en el manejo del presupuesto y transparencia en las contrataciones. Advirtieron que de no corregirse el rumbo, la situación podría agravarse y derivar en una parálisis total del funcionamiento municipal.
“El relato no alcanza. La realidad económica de San Cristóbal exige respuestas urgentes, no slogans de campaña”, concluyeron.
