Por ANDRES GIMENEZ – El Cementerio Municipal de San Cristóbal vuelve a ser blanco de delincuentes. En los últimos días, familiares de personas sepultadas denunciaron el robo de una puerta de aluminio y placas de panteones, provocando un profundo dolor e indignación. Según los afectados, ni siquiera los floreros están a salvo de los saqueos, convirtiendo el lugar en un foco constante de vandalismo.
“Es una falta de respeto total hacia nuestros seres queridos. No hay control ni medidas para frenar esto, y los objetos robados desaparecen sin que nadie investigue su paradero”, expresó una vecina afectada.
Robos consecutivos y sin respuestas
El jueves pasado se denunció el hurto de una hoja de una puerta de aluminio, ubicada en la galería de nichos del edificio Sureste. Sin embargo, lo insólito fue que al día siguiente, los ladrones regresaron para llevarse la otra hoja de la puerta, completando el robo.
El empleado municipal encargado del Cementerio presentó la denuncia a la policía, quienes, aunque obtuvieron información sobre un posible destino del material sustraído, no lograron recuperarlo tras realizar un registro con resultados negativos.
Falta de medidas investigativas
La comunidad reclama la falta de allanamientos y operativos para rastrear los materiales robados, cuestionando la aparente impunidad con la que los delincuentes actúan. “No entendemos cómo nadie investiga a dónde va a parar todo lo que se roban del cementerio. Esto ya es insostenible”, agregó un vecino indignado.
Inseguridad en aumento
Este nuevo episodio pone en evidencia la creciente inseguridad en San Cristóbal y la necesidad de implementar controles más estrictos en el Cementerio Municipal para preservar este espacio de respeto y memoria.