Unicef actualizó sus proyecciones sobre el impacto del covid-19 en los sectores más vulnerables y recrudeció su pronóstico. Estimó que el 60% de los chicos que viven en la Argentina terminará el año en situación de pobreza.
Entre diciembre de 2019 y diciembre de 2020, la cantidad chicas y chicos pobres pasará de 7 millones a 8,3 millones en todo el país. Esto equivale a decir que el 62,9% del total de la población infantil del país (6 de cada 10 niños y adolescentes), viven en condiciones de vulnerabilidad social, una situación que se agravó por el parare económico a causa de la pandemia de coronavirus.
El duro diagnóstico que dio a conocer este miércoles Unicef empeoró respecto del difundido en mayo. En ese mes, la organización que está bajo la órbita de la OMS había calculado que para diciembre de 2020 habría 7 millones de niños pobres en Argentina, es decir, el 57,2% del total de chicos. Ahora, subió 5 puntos porcentuales ese dramático panorama.
Unicef volvió a remarcar que pese a la gran cantidad de programas destinados a evitarlo, Argentina nunca logra reducir este indicador y advierte que en los últimos años, la cifra empeoró y ahora se recrudeció con la crisis sanitaria por el covid-19 que afecta a todo el mundo.
Respecto de los chicos que están en situación de pobreza extrema, es decir, indigencia, las proyecciones también son igual de preocupantes. Se pasó de estimar 1,8 millones de niños indigentes (16,3%) a 2,4 millones (18,7%) que prevés caerán en esta situación a fin de año.
Si la pobreza infantil se mide por la zona donde los chicos viven, en los barrios populares superará este año el 92% mientras que en los otros barrios será del 62%, describe el trabajo de Unicef.
En cuanto al impacto del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), Unicef dijo que alcanza al 47% de los hogares, frente al 22% que lo recibía en abril. “Son 13 millones de personas que habitan en 2,8 millones de hogares donde al menos un miembro recibe el IFE”, señaló la representante de Unicef Argentina, Luisa Brumana, y destacó que la continuidad de los programas de protección social “es clave para evitar que más hogares caigan en la pobreza extrema”.
En tanto, consultado por minutouno.com, Sebastián Waisgrais, especialista en monitoreo e inclusión social de Unicef, sostuvo que las medidas que implementó el Gobierno frente a la pandemia fueron esenciales para mitigar el impacto en la pobreza de los niños y adolescentes. «Especialmente se destacan los refuerzos de la AUH y el Programa Alimentar con impacto directo en los chicos y sus familias», comentó.
No obstante, puso especial énfasis en la necesidad de «mejorar la focalización de las respuestas identificando carencias que no son resueltas por estas transferencias, generando refuerzos adicionales y dando previsibilidad a los incrementos de la AUH, cuya movilidad automática fue suspendida en diciembre del año pasado».
El cambio en el diagnóstico de Unicef se debe a la modificación de las proyecciones económicas que hizo el Fondo Monetario Internacional (FMI) para el país. Mientras en abril, el organismo multilareral calculaba una caída del PBI de 5,7%, hace un mes corrigió esa proyección a 9,9% para este año, lo cual traerá aparejado más pobreza, desempleo y deterioro en la calidad de vida de los argentinos.
También los análisis del FMI para el próximo año no son alentadores. Redujo la recuperación que preveía. Ahora estimó que será más lenta en 2021.