La desaparición de Pedro y Juana ha conmocionado a la comunidad de Chubut, generando un amplio despliegue de esfuerzos por parte de las autoridades y la población local. Con más de un mes sin respuestas, cada nuevo hallazgo se convierte en una luz de esperanza en medio de la incertidumbre. A medida que se intensifican las búsquedas, surgen nuevas pistas que podrían arrojar claridad sobre su paradero.
Búsqueda incansable de una pareja de jubilados en Chubut
La preocupación por el paradero de Pedro Alberto Kreder (79 años) y Juana Inés Morales (69 años) ha llevado a una movilización sin precedentes en la provincia de Chubut. Los esfuerzos de búsqueda se han redoblado, y se han ampliado los operativos tanto terrestres como aéreos en un área de aproximadamente cuatro kilómetros alrededor de Puerto Visser.

El Ministerio de Seguridad y Justicia de la Provincia ha coordinado estas operaciones, que incluyen el uso de drones y canes de búsqueda entrenados para detectar rastros humanos. Las tareas se han centrado en la costa y en zonas de difícil acceso, reflejando la urgencia y la complejidad de la situación.
Organización de la búsqueda: un esfuerzo coordinado
La búsqueda se ha estructurado en cuadrículas, permitiendo una cobertura sistemática del área. Desde el punto donde se encontraron objetos de interés, los investigadores han dividido la zona en dos secciones: un grupo avanza hacia el norte y otro hacia el sur, cubriendo así todo el frente costero.

- Grupo GEOP: Especializado en operaciones de búsqueda.
- Bomberos Voluntarios: De Trelew y Bahía Blanca, colaborando en las tareas de rescate.
- División Búsqueda de Personas: Encargados de coordinar esfuerzos en el terreno.
- División Canes de Comodoro Rivadavia: Expertos en rastreo.
Además, el uso de drones de alta resolución ha permitido observar áreas escarpadas y de difícil acceso, complementando las labores en tierra. Las condiciones geográficas y climáticas de la región complican aún más la búsqueda, pues la zona presenta acantilados, médanos y corrientes marinas peligrosas.
Un mes sin respuestas: el misterio se profundiza
Pedro y Juana fueron vistos por última vez el 11 de octubre, cuando partieron en su camioneta Toyota Hilux hacia la localidad de Camarones. Desde entonces, no se ha registrado ninguna señal de vida ni rastros confirmados de la pareja. El gobierno de Chubut ha mantenido un esfuerzo constante en la búsqueda, trabajando en todas las hipótesis posibles.
El ministro de Seguridad, Héctor Iturrioz, ha indicado que los análisis de las pruebas recolectadas, incluyendo estudios de ADN y pericias biológicas del vehículo, podrían ser determinantes para avanzar en la investigación.
El tiempo transcurre y la angustia de los familiares crece, quienes esperan una respuesta que les brinde claridad sobre lo que pudo haberles sucedido a sus seres queridos.
Hallazgos en la costa: nuevas pistas emergen
Recientemente, se descubrieron objetos en la costa que podrían estar relacionados con la desaparición de Pedro y Juana. Aunque las autoridades no han revelado qué tipo de pertenencias fueron encontradas, estas pistas han reavivado la esperanza de los investigadores.

La Fiscalía de Comodoro Rivadavia se mantiene cautelosa respecto a la información, aunque no descarta ninguna línea de investigación, incluyendo la posibilidad de un homicidio o un accidente en el mar. Es importante considerar que las corrientes del Golfo San Jorge pueden haber arrastrado objetos o restos personales, lo que justifica la ampliación de los rastrillajes marítimos.
El papel crucial de los perros de búsqueda
Los equipos cinotécnicos desempeñan un papel vital en la búsqueda de Pedro y Juana. Los perros de rastreo, provenientes de diversas localidades como Bahía Blanca, Trelew y Comodoro Rivadavia, están entrenados para detectar rastros humanos incluso en condiciones difíciles, como áreas de alta salinidad o bajo tierra.
A pesar de los esfuerzos, los canes han marcado varios puntos de interés, pero sin resultados concluyentes hasta el momento. Las condiciones del terreno y los vientos marinos pueden alterar los patrones de olor, lo que ha llevado a los expertos a realizar las búsquedas en diferentes momentos del día para maximizar las posibilidades de éxito.
La preocupación por el bienestar de Pedro y Juana continúa creciendo entre sus seres queridos. Ambos son conocidos en la comunidad por su participación activa en diversas actividades, y sus familiares mantienen viva la esperanza de encontrarlos con vida, aunque reconocen que cada día que pasa la angustia se intensifica.
“Estamos desesperados, no sabemos qué pensar. Queremos respuestas”, expresó una sobrina de la pareja, reflejando el sentimiento de incertidumbre que ha invadido a la familia y a la comunidad en general.












