“Maté a tu mamá”, le dijo un hombre a su hijo de 26 años luego de asesinar a su mujer de con un disparo de arma de fuego en la cabeza en Villa Gobernador Gálvez, Gran Rosario. Tras la letal agresión el hombre intentó quitarse la vida con varios puntazos y cortes que se provocó en el pecho, por lo que fue derivado a un hospital zonal donde permanece internado en estado reservado y con custodia policial.
Un nuevo femicidio conmociona al sur de la provincia de Santa Fe. El hecho ocurrió durante la madrugada, cerca de las cuatro de hoy en el interior de una casa ubicada en Paraguay al 518 bis de Villa Gobernador Gálvez, donde por causas que se tratan de determinar, Mariza Alejandra Molina, de 44 años, fue brutalmente asesinada con un disparo de arma de fuego en la cabeza.
El principal sospechoso del homicidio es su marido, un hombre que luego del ataque le habría confesado a su propio hijo lo ocurrido: “Maté a tu mamá”, le dijo Juan Antonio B. al muchacho de 26 años, que vive en una casa lindera y fue quien alertó a la policía.
El joven contó que se trasladó hasta la vivienda de sus padres y encontró a su madre tendida sobre la cama matrimonial con una herida en la cabeza. Cuando la policía llegó al lugar, Mariza ya estaba muerta. Las evidencias quedaron a la vista: sobre la cama se encontró un revólver calibre 38 y dos vainas del mismo calibre, y sobre una cómoda un arma blanca con manchas de sangre.
El agresor no se movió del lugar. Es más, la policía debió pedir asistencia médica porque presentaba cortes en el tórax que se había provocado él mismo, aunque ese dato no fue confirmado oficialmente sino que trascendió de fuentes policiales.
El agresor no se movió del lugar. Es más, la policía debió pedir asistencia médica porque presentaba cortes en el tórax que se había provocado él mismo.
Lo cierto es que el principal sospechoso del femicidio fue trasladado al Hospital Anselmo Gamen de Villa Gobernador Gálvez, donde los médicos constataron que tenía una herida de arma de fuego la mano izquierda y una heridas superficiales de arma blanca en el tórax.
Mientras se investiga cómo se produjo la herida de arma de fuego, no se descarta que hubiera sido producida por una esquirla de su propio disparo. En tanto, la lesión de arma blanca podría haber sido producto de la defensa que opuso la mujer al momento de ser baleada.
El hombre quedó internado y con custodia policial mientras el Ministerio Público de la Acusación (MPA) acopia más evidencias del caso, en manos de la fiscal de la unidad de Homicidios Gergina Pairola, La funcionaria ordenó pericias, toma de testimonios y y levantamientos de rastros para determinar circunstancia y mecánica del hecho.
