El caso de Jairo estremece a toda la comunidad de Ceres. Su madre, Maira, relató con profundo dolor cómo durante una semana llevó a su hijo en reiteradas ocasiones al Hospital de Ceres, donde fue atendido por cinco médicos distintos, sin que ninguno lograra advertir la gravedad de su cuadro.
Todo comenzó el martes 10 de junio, cuando Jairo ingresó por fiebre alta. Tras ser atendido, fue enviado a su casa con indicación de ibuprofeno. Al día siguiente, la fiebre persistió y la madre regresó al hospital hasta cuatro veces en la misma jornada. Allí se le realizaron placas y análisis, pero nuevamente le recetaron medicamentos comunes y lo mandaron a su hogar.
El cuadro se agravó y el traslado llegó tarde
El viernes, tras una nueva consulta, se sugirió una posible infección urinaria y se administró un inyectable. Al día siguiente, sábado 14 de junio, Maira llevó a Jairo con evidentes problemas respiratorios. A pesar de sus señales de alarma, el médico de guardia insistió en que sus pulmones estaban “limpios” y lo volvió a enviar a casa.
Desesperada, esa misma tarde Maira decidió tomar un colectivo rumbo a Rafaela. Allí, los médicos diagnosticaron de inmediato Gripe A y Neumonía bilateral. Jairo ingresó a terapia intensiva con el 98% de sus pulmones comprometidos. Tras varios días de lucha y dos paros cardíacos que le provocaron muerte cerebral, falleció el 25 de junio.
Suelta de globos en su cumpleaños
Este 19 de julio, día en que Jairo cumpliría 2 años, su familia convoca a la comunidad a una suelta de globos de colores frente al Hospital de Ceres a las 14 hs, para exigir que no se repitan casos de desatención médica y pedir justicia.
“Jairo no solo pasó por un médico, pasó por cinco distintos en una semana, y ninguno hizo nada. No queremos que ninguna otra familia pase por este dolor. Los médicos no estuvieron a la altura de su profesión y dejaron a mi hijo librado a su suerte”, expresó Maira.
