Recientemente, el Gobierno argentino ha dado un paso significativo al oficializar la eliminación de las retenciones a las exportaciones de carne, estableciendo un nuevo marco que busca potenciar uno de los sectores más relevantes de la economía nacional. Esta medida, que se extiende hasta el 31 de octubre de 2025, tiene el potencial de transformar el panorama del comercio exterior y el desarrollo agrícola en el país.
Detalles de la nueva disposición gubernamental
El Decreto 685/2025, firmado por el presidente Javier Milei, el jefe de Gabinete Guillermo Francos y el ministro de Economía Luis Caputo, establece que las retenciones sobre un conjunto de productos cárnicos se reducen a 0%. Este cambio se produce en un contexto donde se han tomado decisiones similares, como la eliminación de las retenciones a los granos.
La medida tiene como objetivo no solo mejorar la competitividad del sector cárnico, sino también fomentar el crecimiento económico y la generación de empleo. El Gobierno destaca que el sector agroganadero es fundamental para el desarrollo regional y la creación de divisas.
Condiciones para los exportadores de carne
Para que los exportadores se beneficien de esta eliminación de retenciones, deben cumplir una serie de condiciones:
- Liquidar al menos el 90% de las divisas generadas por las operaciones en un plazo máximo de tres días hábiles desde la autorización del permiso de embarque.
- Si no cumplen con esta obligación, regresarán a las alícuotas anteriores.
- El beneficio es exclusivo para quienes oficialicen permisos de embarque dentro del período de vigencia de la normativa.

El artículo 3 del decreto establece que, si se incumplen las obligaciones, además de las sanciones legales correspondientes, los exportadores no podrán acceder nuevamente a las ventajas arancelarias dispuestas por esta norma.
Impacto en el sector agroganadero
El sector agroganadero se presenta como uno de los pilares de la economía argentina. Según el Gobierno, se ha considerado necesario generar condiciones que fortalezcan su desempeño. Este sector no solo es una fuente importante de empleo, sino que también es vital para la generación de divisas, lo que repercute positivamente en el desarrollo regional.
Entre las razones que justifican esta medida, se encuentra la necesidad de reducir los impuestos “distorsivos” que afectan a la competitividad del sector. La intención es avanzar hacia una eliminación definitiva de los derechos de exportación, siempre que las metas fiscales lo permitan.
Un contexto de apertura comercial
La iniciativa se enmarca dentro de una serie de medidas que buscan promover la apertura comercial y la libertad económica. El Gobierno sostiene que estas políticas impulsan el crecimiento de las cadenas de valor agroindustriales, lo que a su vez contribuirá a consolidar la estabilidad macroeconómica del país.
Este enfoque se refleja en el aumento de las colocaciones externas de productos agroindustriales, consecuencia directa de la reducción de los derechos de exportación implementados en agosto de 2024 mediante el Decreto 697/24. En ese entonces, también se incluyeron productos cárnicos, lo que ha demostrado ser beneficioso para el sector.
Retos y desafíos por delante
A pesar de las oportunidades que ofrece esta nueva legislación, el sector agroganadero enfrenta diversos retos. Algunos de los principales desafíos incluyen:
- Asegurar el cumplimiento de las condiciones establecidas por el Gobierno.
- Mantener la competitividad en un mercado global cada vez más exigente.
- Adaptarse a las fluctuaciones de precios internacionales de la carne.
Además, el sector deberá estar preparado para responder a cambios en la demanda, tanto a nivel nacional como internacional, lo que requiere una adecuada planificación y estrategia de comercialización.
Conclusiones sobre el nuevo marco normativo
La eliminación de las retenciones a las exportaciones de carne representa un cambio significativo en la política económica del país. Si bien la medida busca estimular el crecimiento del sector agroganadero, es esencial que los actores involucrados cumplan con las obligaciones establecidas para aprovechar al máximo los beneficios que ofrece esta normativa.
En un contexto donde la estabilidad económica es crucial, el Gobierno parece decidido a fomentar las exportaciones y la inversión en el campo, sentando las bases para un desarrollo más sostenido y equilibrado de la economía argentina.












