En marzo, Fede Bal anunció que le habían detectado cáncer de intestino, luego de sentir fuertes dolores y defecar con sangre en reiteradas oportunidades. Desde entonces puso todo su empeño en sobrellevar un tratamiento que a los cuatro meses le permitió gritar que se había curado.
Según informó Ciudad Magazine, el actor se mostró muy feliz de haber superado esa etapa y contó que en un examen posterior los médicos no pudieron encontrar absolutamente nada.
«Tuve que hacer un tratamiento muy grande, quimioterapia, radioterapia y un montón de cosas duras», contó, reflexivo, Bal. «Hay que entender que las cosas que vienen de la vida son así y ponerle humor. Creo que con el humor y con sentirme que iba a salir y a estar sano, pude salir adelante», agregó el hijo de Carmen Barbieri.
Pero además, Federico se mostró muy contento con una noticia que le dieron hace algunos días. «Me hice un estudio final hace dos semanas para ver qué pasó por adentro y está todo como si nunca hubiese pasado nada. Es mágico, los médicos y mi familia están felices», explicó, antes de contar que adoptó una nueva filosofía de vida. «Celebro la vida todos los días que me levanto. A veces con la vorágine uno no se da demasiada cuenta, pero ahí freno, bajo y digo ‘estoy sano, estoy vivo y tengo que agradecer'», concluyó.