Señaló que las carnicerías están experimentando una falta de suministro y que el precio actual no se ajusta al poder adquisitivo de los consumidores.
Williams mencionó que la subida de precios ha sido significativa, afectando las ventas y dejando las carnicerías con falta de stock. Al ser consultado sobre cómo el precio internacional podría influir en el mercado local, afirmó que si se ajustara el precio local al internacional, el kilo de carne podría superar los $20,000 pesos argentinos. Esto se debe a que el precio internacional se establece en dólares, y en el mercado mundial hay otros productos como pollo y cerdo que pueden sustituir a la carne vacuna.
Con respecto a la posibilidad de que se liberen las exportaciones totales, Williams expresó su escepticismo, afirmando que, aunque se exporten más cortes, el mundo no tiene una gran demanda de estos productos. También advirtió que si se liberalizan las exportaciones en general, la disponibilidad de carne en el mercado interno disminuirá, afectando el consumo local.