¿Qué va a pasar con las vacaciones de invierno? La pregunta aún no tiene respuesta pero desde la Dirección General de Escuelas explicaron de qué depende la decisión. En concreto el titular de la DGE, José Thomas, aseguró que es una posibilidad que está siendo estudiada y que hay dos factores que serán clave a la hora de determinar la necesidad de adelantar el receso invernal.
Una de esas variables es la temperatura. Aunque parezca una obviedad, en invierno hace frío y los protocolos obligan a mantener ventilación cruzada en las aulas con ventanas abiertas cinco centímetros. Por eso, a la hora de tomar una decisión se debe contemplar desde ese punto de vista teniendo en cuenta que julio suele ser el mes con menores temperaturas y si se adelantan las vacaciones los chicos retornarán a la presencialidad ese mes.
Pero existe un factor más que puede inclinar la balanza y que le da fuerza a la posibilidad de adelantar el receso invernal. «Si bien lo estamos evaluando por el frío, también entendemos que en julio podríamos llegar a tener a un porcentaje mayor de vacunados«, explicó Thomas.
Esa es sin lugar a dudas la clave de la discusión. A pesar de las bajas temperaturas de julio, tener a gran parte de la población vacunada pesaría más a la hora de tomar la decisión. «Lo estamos evaluando semana a semana. Aún no podemos dar definiciones», remarcó el titular de la DGE.
Aunque Thomas no lo mencionó, existe otro factor que sin dudas está siendo seguido de cerca: la situación sanitaria. Si bien la cantidad de casos se ha amesetado, el promedio de casos diario sigue siendo alto y la situación en los hospitales es tensa. Pero el dato que más alarma es que ha aumentado a niveles récord el número de fallecidos en la provincia.
De mantenerse esa tendencia existirá aún más presión para suspender la virtualidad y en ese contexto adelantar las vacaciones de invierno surge como una posible alternativa.
