San Cristóbal – Durante el último fin de semana, abrió las puertas de su hogar para ofrecer cortes de pelo gratuitos a niños, un gesto de generosidad que resalta la importancia de la solidaridad en tiempos difíciles.
La idea de Graciela surgió como respuesta a la creciente necesidad de asistencia en nuestra comunidad. Al observar las dificultades económicas que enfrentan varias familias, decidió poner su talento y recursos a disposición de quienes más lo necesitan. Su casa se convirtió en un pequeño salón de belleza improvisado, acogiendo a niños de diversas edades que, gracias a ella, pudieron disfrutar de un momento de alegría y renovación.
Durante la visita, se conversó con Graciela mientras atendía a sus jóvenes visitantes. «Ver la sonrisa de los niños y saber que estamos ayudando de alguna manera a sus familias es la mayor recompensa que puedo recibir», nos comentó. Su iniciativa no solo proporciona un servicio valioso sino que también fomenta un espíritu de comunidad y ayuda mutua entre los vecinos.
Esta acción solidaria de Graciela Perg es un brillante ejemplo de cómo los individuos pueden marcar una diferencia significativa en la vida de los demás con gestos de bondad. Su historia inspira a otros a buscar formas de contribuir al bienestar de la comunidad, demostrando que juntos podemos superar los desafíos y construir un entorno más solidario y acogedor para todos.